Señor director:
Durante el próximo año existirá un fuerte debate en el contexto de la creación de un sistema de educación superior para Chile, que tendrá altas complejidades por la enorme asimetría de las instituciones participantes en él, lo que debe ser visibilizado a la hora de establecer asignaciones presupuestarias.
Las universidades en Chile hoy son instituciones altamente heterogéneas, conviviendo actualmente casas de estudio con altos estándares de desarrollo en investigación básica y aplicada, entregando docencia de cátedra y experimental desde sus orígenes, que evidentemente hacen más costosa la prestación del servicio de educación superior, con otras que no reunen estas condiciones. No es lo mismo una universidad amplia, profunda y líder en investigación (compleja), que otra institución que sólo replica conocimientos a través del pregrado, dedicándose exclusivamente a impartir carreras de bajo costo.
En este sentido es importante crear un sistema de educación superior que asuma las diversidades, que diferencie los costos y que considere el aporte que realiza al pregrado la ciencia, la tecnología y la docencia de postgrado.
Hoy se vive en una realidad “sin sistema” ampliamente desregulada donde muchas instituciones reivindican discursos de lo público, mas sus modelos de gestión y desarrollo institucional se materializan con menores costos que otras universidades que tienen las ataduras propias de la burocracia administrativa estatal, con proyecciones institucionales que van más allá que un simple “college universitario”.
El Gobierno y el Congreso deben hacer notar las diferencias.
Juan Arturo Squella S.
Decano Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas Universidad de Chile
Daniel Burgos B.
Senador Universitario Universidad de Chile
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Carta al Director del Diario La Tercera publicada el día jueves 19 de noviembre de 2015 [descarga].-
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