Señor director:
La demanda por fondos para investigadores jóvenes retornados de su formación de postgrado en el extranjero evidencia un grave problema de planificación, que sin duda afectará la inversión en capital humano avanzado.
La formación de investigadores debe responder a un ciclo lógico que permita asegurar el adecuado retorno del investigador, así como su posición académica en una universidad, centro de investigación o empresa por un tiempo mínimo. De no ser así viviremos un escenario de profesionales con formación de postgrado de alto nivel, sin lugares donde ejercer las ciencias, artes y/o humanidades, que terminarán subempleándose o, en su defecto, volverán a los países donde recibieron la formación. Esta situación implica una gran pérdida para el país.
He aquí otro argumento para acelerar la creación de un ministerio de ciencia y tecnología que actúe como rector y protector de estos asuntos.
Daniel Burgos
Senador universitario
Universidad de Chile
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